sábado, 23 de junio de 2012

EMS

Hay momentos en la vida en los que deseamos sumirnos en un sueño profundo y no despertar, y que al abrir los ojos todas nuestras pesadillas hayan desaparecido.
Sé que es difícil sacar el valor suficiente como para hacer frente a nuestros problemas, pero yo confio en ti. Estoy segura de que lo conseguirás porque, sin lugar a dudas, eres de esa clase de personas a las que, cuando las miras, sientes que tienen un alma pura y única. Quizás pienses que digo todo esto porque te quiero y me dejo llevar por los sentimientos, pero te confundes. Yo sé lo que eres capaz de hacer, aunque tú aún no te hayas dado cuenta. Tienes magia, amigo. Sí, esa magia que es capaz de hacer sonreír a una persona cuando está hundida, esa magia que hace que todo el mundo que se digna a conocerte te adore por encima de todas las cosas, esa magia que hace que tus ojos brillen a cada instante, esa magia por la que muchas personas darían su vida. Eres luz, amigo. La luz que me ha guiado cuando estaba perdida y sola, la luz que me ha hecho sentirme feliz, que me ha hecho estar más segura de mí misma, que me ha hecho ser fuerte.
Por todo esto y más no voy a dejar que te hundan, ni siquiera voy a permitir que lo intenten. Vamos a luchar juntos, prometo estar siempre a tu lado, no dudes en coger mi mano cuando lo necesites, no te abandonaré, ni ahora ni nunca. Pero prométeme a cambio una cosa: prométete que creerás en ti un poco más, no pido que de la noche a la mañana lo hagas, pero, por favor, entiende de una vez que eres sencillamente increíble, amigo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario